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viernes, 18 de enero de 2013

Hasta pronto

Hace ya un tiempo comencé a escribir casi en secreto. De a poco, les fui contando a mis allegados más queridos y cercanos de la existencia de este blog.

Un tiempo antes, tuve que escribir lo que fuera lo más difícil de escribir. No fue un ensayo discursivo para una materia en inglés de la facultad; fueron las palabras de despedida para mi abuelo.

Hace un mes, me tocó despedir a Eduardo también con una carta. Eduardito, era el tío de mamá. Podríamos decir, mi tío abuelo. Sin embargo, él fue mucho más que eso en mi vida, en la de mi hermana y en la de mis primos. Fue difícil pero el cariño era tan grande que las palabras se escribieron solas. Me gusta pensar que acá, en este blog, van a ser inmortales como su presencia en mi vida. La comparto con quien quiera leerla:


Querido Eduardo:

Como dice el dicho popular, “la familia no se elige; te toca en suerte”. Bueno, en nuestro caso, nosotros nos elegimos: vos nos elegiste a mis primos y a mí como nietos. Nosotros te elegimos como abuelo. Valentina te eligió como su bisabuelo. Y con toda seguridad puedo afirmar que tuvimos un gran abuelo en vos.

Estoy feliz de haberte tenido en mi vida por más de 32 años, por haber aprendido de tu dulzura y tu bondad, por haber disfrutado de tu sonrisa y tu cariño. Por todo eso y mucho más ¡gracias!

Podría continuar largo y tendido, pero vos y yo sabemos que nos despedimos como necesitábamos. Tus lágrimas y tu caricia en mi mano fueron pruebas certeras de que todo lo que te dije te llegó al corazón, y eso me tranquiliza, y eso me reconforta en medio de esta tristeza porque – en definitiva - te fuiste rodeado de todo el amor de los que te adoramos.

Entonces hoy elijo desearte un buen viaje. Acá nos quedan las sonrisas al recordarte con “La boina de Eduardito”, con tus bolsas gigantes de Rocklets en Navidad, o con las masitas secas para el té que nos llevabas los domingos en familia. Ahora andá tranquilo pero quiero que sepas que ya nos volveremos a encontrar.

¡Descansá en paz, Eduardito!
Te quiero y un montón
                                        Dolo